Seguramente en muchas ocasiones has escuchado a tus tías o alguna abuelita decir: “Me dio la diabetes por un susto muy fuerte”. Pero, ¿realmente esta enfermedad crónica puede originarse de esa manera?

La diabetes es una de las enfermedades más comunes en nuestro país, y es crucial desmentir algunos mitos muy arraigados en nuestra sociedad. La Federación Mexicana de Diabetes A.C. aclara que un susto NO puede desarrollar diabetes en una persona.

Desmitificando el mito

Para comprender mejor, es importante recordar que la diabetes es una enfermedad en la que el páncreas deja de producir insulina de manera efectiva o reduce significativamente su capacidad para regular el azúcar en la sangre.

En muchos casos, la diabetes no presenta síntomas evidentes al principio, pero existe una falla subyacente en el organismo que no ha sido detectada. Aquí radica la importancia de realizarse chequeos preventivos regularmente.

El papel del estrés

Cuando enfrentamos situaciones de alarma o estrés intenso, como el enojo, un susto o una impresión fuerte, nuestro cuerpo produce hormonas como la adrenalina. Estas hormonas contrarrestan la acción de la insulina, provocando un aumento temporal de los niveles de glucosa en sangre.

Sin embargo, es fundamental entender que el estrés o el susto no causan la diabetes. Más bien, estas emociones pueden detonar síntomas en personas que ya tienen una predisposición o una falla no diagnosticada en su organismo.

La ciencia detrás del estrés y la diabetes

El estrés crónico y el manejo inadecuado de emociones pueden contribuir a problemas de salud a largo plazo, incluyendo el desarrollo de resistencia a la insulina en personas predispuestas. Además, los niveles altos y persistentes de glucosa pueden dañar los vasos sanguíneos y los nervios, complicando aún más la salud del paciente diabético.

Sin embargo, la aparición de diabetes tipo 2 es un proceso multifactorial que involucra genética, estilo de vida, y otros factores de riesgo como la obesidad y la inactividad física.

Importancia de la educación y prevención

Es crucial educar a la población sobre la verdadera naturaleza de la diabetes y la importancia de la prevención. Mantener una dieta equilibrada, realizar actividad física regularmente, evitar el tabaco, moderar el consumo de alcohol y gestionar el estrés de manera efectiva son acciones fundamentales para reducir el riesgo de desarrollar diabetes.

Además, los chequeos médicos regulares pueden detectar problemas de salud antes de que se conviertan en enfermedades crónicas.

Reflexión final

En resumen, un susto o una situación de estrés no causan diabetes, pero pueden revelar una condición subyacente que no ha sido diagnosticada. Es esencial desmentir estos mitos y fomentar una mayor comprensión sobre la diabetes para mejorar la salud pública y reducir la prevalencia de esta enfermedad en nuestro país.

No permitas que los mitos influyan en tu salud: la educación y la prevención son tus mejores aliados contra la diabetes.